lunes, 21 de abril de 2014

Une touche fémenine (II) Le nouveau femme

“Parece como si un pepino gigante hubiera invadido las rosas y los claveles del jardín y los hubiera ahogado”. Virginia Woolf.
“Una obra de arte es feminista no cuando está realizada por una mujer, sino cuando ésta problematiza y subvierte las formas en que un texto o sistema de significación específico opera dentro de un orden social dado produciendo hegemonía u opresión”. Griselda Pollock.

Parafraseando a Pablo Neruda con Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera me gustaría comenzar un pequeño recorrido en el que pretendo hablar sobre el Seminario Internacional Mujeres y arte de vanguardia y el ciclo de Conferencias dentro del Festival Miradas de Mujer que han tenido lugar tanto en el MPM (Museo Picasso de Málaga) como en el CAC (Centro de Arte Contemporáneo) sobre miradas de mujer en el arte, en concreto en el arte contemporáneo. Y es que como apunta Neruda podrán cortar u ocultar en este caso la presencia femenina en la historia del arte, podrán obviarla y silenciarla escondiéndola en los grandes almacenes como ocurre en muchos museos, pero nunca podrán cambiar la historia del pasado ni del presente, muchas de estas mujeres hicieron historia y por ello hoy su influencia, su legado y artisticidad siguen presente. 

Hoy aun esta realidad no es siempre vista de este modo, son muchos, por ejemplo los libros y manuales que siguen mostrando una historia del arte sesgada en donde la mirada masculina del artista creador es la única y principal, la mujer creadora prácticamente no aparece y para encontrar algo sobre ello tenemos que recurrir a ejemplares específicos del tema. De igual modo ocurre con muchos de los museos a los cuales solemos ir, se encuentran repletos de obras realizadas por artistas, mientras que el punto de vista femenino, como ya nos apuntaban las Guerrilla Girls, únicamente lo encontramos en los desnudos inmaculados de muchas obras. 


Y sin planearlo demasiado ya estaba apuntada a ambos, Conferencias y Seminario Internacional. Las conferencias iban acompañadas de un vídeo producción sobre la artista y su obra. Mujeres con una gran producción artística, alguna de ellas poco mediatizadas y conocidas por la gran mayoría pero ello no quita que su trayectoria sea de gran importancia para la historia del arte. Artistas como Shirin Neshat, Tracey Emin, Louise Bourgeois o la misma Marina Abramovicentre otras muchas, nos muestran el alcance y la repercusión que sus obras tuvieron en el campo del arte contemporáneo. Sin duda y desde mi experiencia Shirin Neshat fue la que más me impresionó, no sé si es porque de las demás tenía un cierto conocimiento o porque fue la primera conferencia pero me impactó de una forma impresionante la fortaleza y valentía que le otorga a la mujer iraní dentro de la cultura musulmana.


















Durante las sesiones del Seminario Internacional se han llevado a cabo distintos planteamientos en donde se pueda llegar a establecer un espacio intermedio en el que debatir y crear nuevos discursos donde la visión femenina tenga también un peso importante dentro de la historia del arte. Entre muchas de las ponencias me llamaron la atención la referente a la imagen que los surrealistas tenían de las mujeres, como un sujeto fragmentado, incompleto, en ocasiones visto como un órgano, como algo biológico sin identidad propia. Del que se seleccionaba distintas partes femeninas y se juega con ellas, se disponen al gusto del consumidor. Pero frente a esta desgarrada y mutilada mirada las mujeres artistas tales como Dorothea Tanning, Leonora Carrington, Meret Oppenheim, Claude Cahun, etc. continuaron con su labor artística. 

















Otra de las ponencias trataba sobre la mujer de la Bauhaus, en donde su producción artística era vista de una forma artesanal carente de valor artístico, desprestigiada por los artistas masculinos. La mujer dentro de la Bauhaus tenía un papel secundario, después de que Weimar admitiese a las mujeres en el programa casi siempre su aprendizaje y trabajo iba enfocado al taller textil o  de cerámica frente a otros talleres más "masculinos" como eran el taller de madera, de publicidad o el de metal entre otros. Aun con todo ello muchas de estas mujeres supieron poner de entredicho esta jerarquización de las artes y revalorizar el arte artesanal considerado de menor rango y carente de valor estético. Alma Buscher, Marianne Brandt Lucía Moholy entre otras muchas son algunas de las artistas que consiguieron cambiar la forma de ver a la mujer artista como simplemente un sujeto carente de valor estético y artístico. 




Todo ello nos apunta a que de una forma u otra es muy necesario que este tipo de seminarios y conferencias se lleven a cabo para poder poner en tela de juicio muchos de los discursos asumidos sobre que todo está ya superado y es cosa del pasado. 
El siglo XXI se encuentra a debate, el arte está dentro de ello y así debemos reformular y crear nuevos planteamientos. El arte no puede ser caduco, ni permanecer anclado en el pasado, sino que se encuentra en constante cuestionamiento. 
"Yo no hubiese sido artista si no hubiera existido el feminismo" Susanne Santoro.
Fuente: CHADWIDCK, Whitney, Mujer, arte y sociedad. Destino, Barcelona, 1992.

jueves, 3 de abril de 2014

Une touche fémenine (I)

"Hablar de mujeres no es hacer crítica feminista" Estrella de Diego.
"Occidente únicamente conoce la historia contada por el Padre" Victoria Sendón.

Hoy día, a simple vista nos puede parecer que términos como machismo, desigualdad o feminismo ya están superados, que es algo que quedó años atrás y que en el siglo XXI no queda ni un ápice de ellos. Ojalá fuese cierto, pero sabemos que no es así. Quizás se intente enmascarar el hecho de que aun sigue habiendo una gran desigualdad, empezando porque se confunden los conceptos o porque se cree que llegando a igualar el número de hombres y mujeres diputados se consigue una igualdad de género, o como también empleando el masculino y femenino de una palabra. Puede que esta forma de intentar "solucionar el problema" solo llegue a modificar el envoltorio, la superficie de lo que realmente sucede.

"El arte es constitutivo de la ideología, no es meramente una ilustración de ella" Griselda Pollock. 
Dentro del establecido sistema ideológico en donde el patriarcado es el medio dominante; el cual se basa en relegar a la mujer un papel estático, sometido y supeditado al del hombre, todo ello llevado a cabo en un espacio acotado, cerrado y privado conocido como la domesticación femenina. La mujer encuentra un medio en donde mostrar su visión del mundo y su no conforme condición impuesta. Por medio del arte, mujeres pioneras como Artemisia Gentileschi o Mary Cassatt, entre otras muchas, exponen una intención feminista en la creación de un sistema de miradas que ponen en evidencia las relaciones de género. Fue de forma más evidente en las primeras décadas del siglo XX cuando esta apuesta por mostrar otra forma de ver la realidad se hizo visible en el sufragismo y en la demanda del derecho al voto femenino. Es muy conocido el acto violento de protesta que llevó a cabo la sufragista Mary Richardson cuando rajó el lienzo de La Venus del espejo de Velázquez, pretendiendo llamar la atención de los medios de masas para hacer eco de la lucha que se estaba llevando a cabo por los derechos de la mujer.






















La oleada de movimientos vanguardistas inundó todo el panorama artístico a lo largo de este periodo. Estos artistas fueron creando un nuevo campo artístico, nuevas formas e innovadores procedimientos artísticos, pero a pesar de esta ruptura de formas los "héroes" seguían siendo los mismos. La mujer artista era vista como seguidora o incluso imitadora del arte que estaba realizando su protagonista masculino, llegando a no considerar su arte "serio" y solo un reflejo de todo ello. Así seguiría a la sombra, como compañera y admiradora del trabajo trasgresor del artista masculino. 


















A pesar de todo ello el número de mujeres artistas crecerá, se atreverán a pintar, esculpir, fotografiar, etc. Entre muchas de estas mujeres encontramos a Köthe Koll, artista que trabaja dentro de la corriente del expresionismo alemán. Usando la técnica del grabado nos muestra una visión más directa con la realidad del momento. Sus protagonistas serán la crudeza y la miseria que el ser humano estaba sufriendo. Realiza una fuerte crítica social pero desde una mirada diferente en donde la mujer se ve realmente completa, vista por sí misma, creando su propia identidad. Así tanto los hombres como las mujeres se encuentran cargados de una fortaleza alejándose totalmente de todo estereotipo. 

"Los hombre actúan y las mujeres aparecen. Los hombres miran a las mujeres. Las mujeres se contemplan a sí mismas mientras son miradas" John Berger.
Queriendo de esta forma romper con este esquema impuesto y estereotipado, poniendo en tela de juicio todo ello el arte recurre a la deconstrucción como método queriendo por tanto destruir toda aquella identidad construida y ya creada para crear una nueva desde otro punto de vista. Para ello muchas artistas recurrirán al uso del disfraz como es el caso de Claude Cahun exponente del surrealismo, que con su trabajo de interpretación de diversos roles crea un repertorio de diversas identidades. Cahun juega con los estereotipos y los distintos papeles que tanto la mujer como el hombre desempeñan en la sociedad y que parece que no podemos escapar de ellos, crea de esta forma un discurso en donde pone en evidencia los distintos papeles que ambos desempeñan y lo absurdo de ello. 


Por ello y después de todo aun queda un largo camino que recorrer para que la mujer pueda sentirse libre, completa, y vista por sí misma, despojada de todo este sistema impuesto. Para ello hace falta crear nuevos discursos, una nueva mirada, resquebrajar estereotipos y roles que son los que posicionan a uno y a otro y así transformar la visión establecida donde no solo una opción sea la válida. 
"¿Por qué era un sexo tan próspero y el otro tan pobre? ¿Por qué son pobres las mujeres? ¿Quién podrá afirmar que la novela no tiene la configuración adecuada para que la use la mujer?"  Virgina Woolf, Una Habitación propia, 1929.

Fuente: TRIGUEROS ALARIO, Mº Teresa, Arte y Feminismo. Nerea, San Sebastián, 2008. CLARK, Toby, Arte y Propaganda en el siglo XX. Akal, Madrid, 2000. BERGER, John, Modos de ver. Gustavo Gili, Barcelona, 2012.